Latinogourmand
Un poco de historia
Es en 1995, que durante sus largos viajes por América Latina, Europa y los Estados Unidos de América, por razones de trabajo, que Guillermo COOPER (Willy, para sus amigos), constata por si mismo la riqueza y variedad de la cocina peruana, aparte de los productos nobles que los acompañan, como la lúcuma, el maíz morado, variedades muy diversas de papas. Resultado del mestizaje de casi 500 años de brazaje de diferentes cocinas entre ellas las que más han dejado trazas, huellas y sabores se encuentran, la cocina Inca, española, mediterránea, turca, china de Cantón (para él históricamente una de las más importantes del mundo), italiana, africana, japonesa, todas estas llegadas con los extranjeros por diferentes razones han dado a la cocina peruana, productos, condimentos, legumbres, técnicas de cocina, sistemas de conservación los cuales han contribuido a lo que ahora con orgullo llamamos cocina peruana.
A todo esto hay que sumar productos peruanos y latinoamericanos que han contribuido a la alimentación y gastronomía mundial como: el maíz, la papa, el tomate, el cacao, el cacahuete, camote, oca, yuca, pallar, caigua, huacatay, quinua, tarwi, cañigua, oca, olluco, mamey, guaba, variedades de zapallos, de frejoles, de ajíes, etc., etc.
Como él mismo dice, al salir y probar otros tipos de cocina “me di cuenta, por constatación que la cocina peruana era buena, rica y variada y que una vez puesta a nivel de normas gastronómicas mundiales podría competir por qué no con las mejores del mundo”, fue así como años después gracias a la corriente iniciada por Gastón Acurio que se llegaría a lo que ahora es “reconocida en muchas partes del mundo”. Fue así como nació la idea de hacer un restaurant peruano en Paris y la adquisición del primer restaurant hacia los años 1999.